“Estamos presos en las comunidades”
El domingo 1ero de abril se llevó a cabo una nueva represión en el “Barrio Obrero” de la comunidad wichí,la caul terminó con heridos y cuatro personas detenidas. Entre ellas, Roberto Frías, autoridad ancestral de la comunidad wichí,
quién había sido encarcelado el año pasado y tras su liberación en julio, continuaba
siendo perseguido. Ante la amenaza de una brutal y eminente represión y el
constante hostigamiento por parte de la policía formoseña contra su familia - y
encontrándose en estado de salud grave a causa de una herida de bala en la
espalda sufrida durante los ataques policiales- Roberto decidió entregarse a
las autoridades policiales.
Sin embargo la represión continuó y junto con Roberto fueron
detenidas otras personas, por lo cual integrantes de la comunidad decidieron concentrarse
en la comisaría local para exigir que les dijeran dónde se encontraban y el
estado de los detenidos, además de exigir atención médica, ya que se sabe de la
brutalidad con la que actúa la policía y temían por la salud de sus
integrantes.
Este no es un hecho aislado. Esta represión se enmarca en un
contexto de persecución constante al pueblo wichí de Formosa y especialmente a
las comunidades de Ingeniero Juárez. La sistematicidad en la violencia y el
hostigamiento ejercido por el estado provincial demuestra que el genocidio
indígena está más que vigente. Desde hace un año, cuando tras una represión se
comenzó con el armado de causas policiales y posterior detención de mujeres y
hombres wichí, se dio rienda suelta a un plan sistemático de persecución
indígena, el cual que se ha visto reflejado en la militarización de los barrios
wichí y en diferentes represiones a lo largo del año. La persecución a indígenas
que se atreven a alzar la voz en favor del respeto de sus derechos resulta
moneda corriente en Ingeniero Juárez; detenciones ilegales de integrantes de
las comunidades, incluyendo menores de edad; armado de causas judiciales y
ordenes de captura para justificar una persecución política y racista;
desaparición de integrantes de comunidades wichí, entre ellos Víctor Solano, anciano de la
comunidad que se encuentra desaparecido hace varios meses y aún hoy no se sabe
de su paradero; represiones en las cuales se han disparado contra mujeres,
niños y adolescentes; institucionalización de niños, desprendiéndolos de su seno
familiar y comunal y en muchos casos siendo trasladados a otras provincias como
Buenos Aires; son sólo algunas de las cosas que suceden cotidianamente en
Ingeniero Juárez.
Creemos fundamental pronunciarse en contra del genocidio
wichí, por lo cual pedimos difusión y apoyo de todos los sectores de la
sociedad. Adjuntamos los teléfonos de la comisaría de Ingeniero Juárez para llamar y preguntar sobre el estado de los
detenidos y exigir su libertad.
No podemos hacer la vista hacia otro lado cuando en
Ingeniero Juarez se lleva a cabo un verdadero terrorismo de Estado.
Basta de perseguir a los wichí!
Basta de genocidio Indígena!
Gildo Insfrán genocida!
Imágenes: facebook Libertad a lxs wichí!



